El gobernador del Banco de España quiere nacionalizar todas las entidades y olvidarse de planes de salvamentoLa vicepresidenta se niega, porque dispararía el coste del 'saneamiento' del sector. El gobernador pretende marcharse en junio escondiendo su fracaso en la reforma con cargo al erario público.
A la vicepresidenta económica del Gobierno, Elena Salgado, está en todos los frentes y en ninguno saca la cabeza. La reforma financiera ha sido un fracaso y lo único que le ha salido adelante son los recortes en salarios y pensiones... que sólo han servido para deprimir la economía y alcanzar un desempleo del 20% de la población que busca trabajo.

Pero, probablemente, la reforma más desastrosa -e innecesaria- sea la llamada reforma financiera o saneamiento de las cajas de ahorros. A estas alturas, casi todos los procesos de fusión continúan pendientes.

El gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez (MAFO), quiere generalizar el sistema CAM, es decir el más caro para el erario público: nacionalización pura y dura, saneamiento con fondos públicos y posterior venta o subasta a terceros. La vicepresidente económica se niega porque eso dispararía un coste que hasta ahora se preveía de 25.000 millones de euros, pero que probablemente resulte muy superior.

Hay que tener en cuenta que MAFO cesa el próximo mes de junio y que no espera ser renovado por el Gobierno Rajoy que se supone subirá al poder en noviembre.

MAFO tiene una ventaja sobre Salgado: controla el FROB y ocupa todo su tiempo en la tarea. Por eso pretende retirarse dando por finiquitada la tan cacareada reforma financiera. Pero eso sí, con cargo al erario público.

¿Era necesaria la reforma de cajas de ahorros? Por supuesto que no. Y si alguna no puede salir adelante, se cierra y en paz. Porque la mejor forma de quebrar un banco es decir que está quebrado. Este es un negocio de crédito, es decir, de confianza.

Miriam Prat

miriam@hispanidad.com