Uno de los objetivos de los marchantes consiste en terminar con la fabricación del foie-gras, una verdadera humanada.
En cualquier caso, el asunto está claro: la única especie animal que no merece nuestra protección y cariño es el hombre, un verdadero depredador a quien hay que pararle los pies o acabará con la fauna y flora del planeta, esto es, con los sentimientos.
Pero, ¿qué hacen estos pibes?