Almunia ha continuado hablando del problema de la inmigración: Me puse  a pensar en inmigración, en qué es lo que Europa tiene que hacer en materia de inmigración. Hasta ahora los estados miembros han dicho que la inmigración es suya y ahora resulta que sí, que la UE sí tiene que ocuparse. Es un desafío para lo que nos queda de vida, porque cuando se ve el desequilibrio económico o demográfico, la inmigración estará aquí siempre. 

 

Sobre el proceso de crecimiento de la UE, Almunia ha dicho que el enorme drama de los dos referéndums que se perdieron hace un año, el francés y el holandés, es que en estas dos áreas donde Europa necesita avanzar cuanto antes, la inmigración y la energía, con políticas comunes y visión de futuro, la constitución da instrumentos, pero está bloqueada por el no francés y holandés. Almunia espera que la presidencia alemana encuentre la llave que desbloquee ese camino, porque hay que dar soporte a quienes creen que para ganar el futuro, hay que ser valiente e imaginativo. Y los españoles sabemos muy bien que esta es la solución. Y se ha preguntado que sería de España si no hubiéramos entrado en la UE. Yo creo que tenemos la responsabilidad de decirle a los europeos que no tengan miedo a integrarse en Europa porque Europa nos da soluciones a todo esto.

 

Ha señalado también Almunia que no me planeta volver a la política española, pertenezco a una generación que hablaba de Europa como algo ajeno, pero me he acostumbrado a hablar de Europa como algo mío, que es de los españoles igual que de los alemanes o británicos. Estar en Europa es estar en la política. Mi aspiración es seguir con mis responsabilidades como comisario hasta 2009.