Los contactos de Hispanidad con banqueros, empresarios y ejecutivos españoles dan que pensar. Parece imponerse el Lieber Deutscher alf katalaner: Antes alemán que catalán. Realmente, nunca como ahora, cuando se ha sabido que Manuel Pizarro se había buscado un caballero blanco alemán, que simplemente va a deglutir Endesa, se ha dado razón a los nacionalistas catalanes. Puede que CiU o ERC practiquen el victimismo y el vituperio- pero realmente la catalanofobia ha crecido en España de forma más que peligrosa.

Fue Miguel Arias Cañete, el portavoz económico del Grupo Parlamentario Popular quien habló de cualquiera antes que un catalán. Ahora, sus palabras se han hecho realidad, pero efectivamente, es muy fácil romper un país que ya está roto, y que no compite con franceses, británicos, alemanes o norteamericanos, sino con Cataluña.