Los datos son conocidos. La inmobiliaria Inmocanal, propiedad del empresario andaluz Luis Portillo, ha lanzado una OPA sobre Inmobiliaria Colonial a un precio de 63 euros por acción. Hasta ahí todo correcto, aunque lo que tiene mosca al sector es por qué La Caixa firmó con Portillo un compromiso irrevocable de venta de su paquete de control, a un 39,37% del capital.

El asunto tiene su enjundia porque en estos momentos varias inmobiliarias se están planteando una contraopa que incluso podría alcanzar los 70 euros por acción. Y probablemente lo hagan, pero no les hace mucha gracia enriquecer a un competidor con el que La Caixa ya se ha comprometido a vender a 63 euros.

En cualquier caso, la pregunta sigue en pie: si se trataba de una oferta pública ¿Por qué la entidad catalana asumió ese compromiso?