• Rajoy homologa a Artur Mas con Alexis Tsipras.
  • Mas porque está echando a los catalanes de Europa.
  • Y le advierte: "Cataluña no se va a ir de España ni de Europa".
  • A Tsipras porque llevará a los griegos.
  • Para el presidente estamos entre dos gobernantes irresponsables.
  • Por su parte, la polaca Ewa Kopakc tampoco ahorra críticas a Grecia.
  • En la reunión, como siempre, estuvieron pendientes Margallo y Pastor, no Soraya.
Cumbre hispano-polaca en Moncloa. Ewa Kopacz, la primera ministra polaca, es una mujer que está para pocas bromas. En plata, que no le gustan que le lleven la contraria. Y tampoco le gustan mucho las monsergas sobre principios. Se dice católica practicante pero forzó que una mujer violada abortara. Se dice muy europea pero ha decidido -esta vez con buen tino- posponer la entrada en el euro, mismamente cuando su mentor, Donald Tusk, preside el Consejo Europeo. Antipatía a los rusos, como todo buen polaco, pero no está dispuesta a entrometerse demasiado con el gigante en defensa de Kiev. Ya saben lo que se dice en Polonia: si nos invaden los alemanes por el oeste y los rusos por el este, ¿a quién debemos disparar primero? La respuesta es: -A los alemanes, porque lo primero es el deber, luego el placer. No obstante, durante la comparecencia ante los medios, Rajoy aclaró que el plan español apoya los acuerdos de Minsk: una Ucrania unida pero con amplia autonomía para las regiones pro-rusas del este. Y Kopacz apoyó la jugada. Por cierto, ambos recuerdan que España y Polonia son las naciones de la UE con mayor crecimiento económico. Como quien no quiere la cosa. Lo mismo con la inmigración y con las riñas severas, de ambos mandatarios a Alexis Tsipras y la desastrosa política griega. Polonia y España siguen aquí los pasos de aquellos a quien hay que disparar por deber: los alemanes de Merkel. Eso sí, Rajoy aprovechó la circunstancia griega para arremeter contra Artur Mas y los independentistas catalanes, bajo la homologación Tsipras-Mas. Para ambos dedicó la primera parte del sermón: "construir es una tarea que exige tiempo y esfuerzo, destruir es muy rápido". Traducido: que Tsipras y Mas sólo saben destruir. Ahí intervino Kopacz, para recordar a los griegos que antes de Tsipras su economía se estaba recuperando y que en cinco meses la han mandado a paseo. Y de postre, alaba a Rajoy, al asegurar que España solucionó el grave asunto de la inmigración. ¿Seguro que lo ha solucionado? Kopacz insiste en su pragmatismo: el fondo intermediario creado para canalizar la ayuda a Grecia implica que todo lo que ponga Polonia en Grecia le será devuelto en caso de quiebra del país heleno. ¿Es así? Yo lo dudo, pero a lo mejor Polonia ha conseguido ese trato de favor. Pero a don Mariano nadie le va a quitar su órdago comparativo, el genial parangón Tsipras-Mas: ¿Qué ha pasado en Grecia? , se pregunta. Y se responde -era una pregunta retórica-: "que los llevaron al país al borde del abismo, eran los mismos que les hicieron promesas que no podían cumplir". Y, de paso, recuerda que hay elecciones legislativas tanto en Polonia como en España, miren por dónde. Y que Podemos, casualmente, es lo mismo que Syriza. Seguimos con el parangón. Lista unitaria independentista en Cataluña. Rajoy se crece. Ojo al dato. "El Estado está absolutamente preparado para hacer cumplir la ley cuando alguien la viola". Y Mas: "el Gobierno garantiza al conjunto de los españoles que vela por el cumplimiento de la ley. Y la ley se va a cumplir"… en Cataluña. Sólo que no nos dice como. ¡Ah! y, en septiembre, lo único que se elige allí es un parlamento autónomo. Y todo esto ocurre "cuando se prometen cosas que van a quedar en nada.  Y esto vale para Grecia y para Cataluña". Por si no ha quedado claro: "No va a haber independencia de Cataluña, no la habrá". Y Cataluña tampoco se va a ir de Europa, porque eso es lo que se les está proponiendo: irse de Europa. El Gobierno garantizará que se va a cumplir la ley y que "nadie va a obligarle a elegir entre su condición de catalán, español y europeo, porque las tres le enriquecen". Como en Grecia, donde quien convoca un referéndum y lo gana tiene luego que dar marcha atrás. Otra cuestión: a los funcionarios se les devolverá su extra de Navidad. No lo prometió pero casi. Eulogio López eulogio@hispanidad.com