En Chile, en el contexto del estallido social comunista y anticlerical -disfrazado de reclamaciones sociales como la de que no suba el billete del metro, pero que ha sido el inicio de una revuelta perfectamente planificada y vendida al mundo como una sana protesta social contra el gobierno neoliberal de Sebastián Piñera-, recientemente se han producido nuevos ataques anticlericales.

Concretamente, en Santiago de Chile, los abortistas atacaron la Iglesia de los Santos Ángeles Custodios, del siglo XIX, que es, incluso, Monumento Histórico Nacional. Dejaron pintadas como "arde la Iglesia", "el rico y la Iglesia te quieren ignorante", "quema tu iglesia más cercana", recoge Religión en Libertad.

El pasado 22 de febrero un grupo de jóvenes católicos se reunió con algunos feligreses, el coordinador parroquial y con el permiso del párroco, José Agustín Tapia Rodríguez, se organizaron para comprar los materiales necesarios y para repintar la fachada, añade este medio.

Durante este trabajo voluntario de limpieza y pintura, algunos transeúntes anticlericales se acercaron con hostilidad y se burlaban diciendo que las pintadas groseras eran «expresiones de arte popular» e «históricas». Según explican algunos jóvenes y feligreses, los voluntarios intentaron establecer una conversación constructiva con los transeúntes burlones, pero "lamentablemente no fue fecundo". Sí fue fecundo el trabajo de limpieza y pintura que devolvió su hermosura serena al monumento, explica Religión en Libertad.