Más que un plan estratégico, lo que afronta Marc Murtra es un plan contra incendios, empezando por la situación de la filial en Alemania y terminando con la salida de Hispanoamérica y la cesión de ese espacio a su máximo rival, Carlos Slim, pasando por los carísimos derechos de la Champions y las tensiones internas con Carlos Ocaña, que quiere sustituirle como presidente.

Pero vayamos por partes, como diría Jack el Destripador. Preocupa, y mucho, la evolución de Telefónica Alemania tras la pérdida, hace dos años, del contrato mayorista con 1&1, el más importante de todos, que le aportaba más del 40% del flujo de caja libre de la filial, un parámetro fundamental en el negocio de las telecos.

Una vez superado el primer impacto, lo cierto es que la situación de Telefónica Deutschland, que opera bajo la marca O2, no es buena, aunque desde la compañía se asegura que la fuga de 1&1 ya está superada. En definitiva, la filial alemana podría entrar en pérdidas, lo que sería, sin duda, un mazazo muy grande para Telefónica.

La Champions: la teleco anunció en la tarde del jueves un acuerdo con la UEFA para retransmitir las competiciones europeas desde 2027 hasta 2031, por 1.464 millones de euros, un 14% más que lo que pagó por el contrato anterior. El acuerdo, en todo caso, no está cerrado aún y siguen negociando, lo que no es necesariamente positivo porque entre los objetivos de la UEFA está reservarse un partido cada jornada para vendérselo a alguna plataforma, como Amazon o Disney, a nivel mundial. Se pueden imaginar en qué partido están pensando.

Sea como fuere, el acuerdo es positivo para Telefónica, aunque sea un 14% superior al anterior. Eso sí, ya hay quien le ha recordado a Murtra que va a pagar 1.464 millones por el fútbol europeo mientras reduce el dividendo a la mitad y se dispone a realizar un duro ajuste de plantilla, en España.

Vamos con la posibilidad de comprar Vodafone España, una operación en la que lleva años empeñado -sí, años- el actual CEO del Grupo, Emilio Gayo. La única razón para llevarla a cabo es incorporar los clientes de la teleco que dirige José Miguel García. Pero cuidado, porque estamos hablando de una compañía que vale unos 10.000 millones de euros en bolsa, frente a los 20.000 millones que capitaliza Telefónica. Para comprar Vodafone España Telefónica tendría que ampliar capital, con todo lo que conlleva y, en cualquier caso, no parece una operación muy recomendable mientras por otro lado negocia y ejecuta un ERE.

Todo esto mientras el Grupo sale precipitadamente de Hispanoamérica, donde su rival histórico, Carlos Slim, se frota las manos. Durante años, el mexicano no pudo extender su imperio más allá de México, por culpa de Telefónica, y ahora observa como la compañía española toca retirada.

Eso en el exterior, porque los problemas internos también acechan a Murtra, como les hemos ido contando en Hispanidad, empezando por el que le afecta más directamente: el pulso con Carlos Ocaña, el consejero de la SEPI, que aspira a sustituirle como presidente… bastante antes de que venza su mandato.