Resultados del Banco Santander. Correctos, con un impacto de la bajada de tipos sobre el margen de interés... aceptable.
El CEO, Héctor Grisi, un mexicano que aún está apegado al "ahorita mismo" se expresa bien. Uno de ese banqueros que no abunda en anglicismos y al que se le entiende todo. Traduce la contabilidad de maravilla y le molesta el aparato financiero; le divierte más hablar de las necesidades del cliente. En este sentido, una gozada.
Era su primera comparecencia tras los dos últimos episodios del banco: la venta de la filial polaca y la compra de la filial británica del Sabadell, el TSB.
¿Por qué ha vendido usted Polonia? Porque me ofrecían 2,2 veces el valor en libros. Hasta ahí todo claro. Lo que quizás desconozca el actual CEO del Santander es cómo se gestó la compra del antiguo Bank Zachodni WBZ (BZ WBK), el tercer banco de ese histórico país. Fue así: el equipo de dirección había estudiado la operación, que coincidía con otra oferta que el Santander tenía sobre su mesa, el Garanti turco, el que luego compraría el BBVA.
Todos los expertos del bano cántabro estaban de acuerdo en que, por tamaño, por mercado, por potencial y por un montón de razones más, el Santander debería comprar el Garanti y no el Zachodni. Emilio Botín sólo hizo una pregunta:
¿Turquía es musulmana y Polonia es católica, verdad?
Sí, le respondieron.
-Pues entonces compremos el polaco: yo no me atrevo a gestionar un banco en una cultura que desconozco.
Y así se hizo, que don Emilio mandaba más que un mariscal. No sé si esto lo haría hoy su hija, Ana Botín, actual presidente.
Volvamos a Grisi: califica a su grupo como 'banca digital con sucursales'. En un año, junio frente a junio, el número de sucursales del Santander ha pasado de 8.348 hasta 7.683, es decir, ha cerrado 650. También se ha reducido la plantilla aunque poco, de 207.000 empleados a 204.000. A ello añadan 176 millones de clientes que crecen a razón de 8 millones de clientes por año, al menos durante los doce últimos meses.
Comentario sobre Argentina, adonde caba de viajar Grisi, sin citarle, apoya las políticas de Milei: "Muy interesante lo de Argentina, allí estamos volviendo a ser un banco. Antes nos llegaban depósitos pero nadie nos pedía crédito, no prestábamos a nadie. Ahora sí". Argentina despierta con Milei, esto parece claro.
Los dos detalles más relevantes: asegura el propio CEO que el Santander es un "banco digital con sucursales". Muy cierto: en un año ha cerrado esas 650 y su crecimiento es exclusivamente digital, por la vía de OpenBank. Cuidado con el ritmo.
Por otro lado, en nueve meses, Ana Botín destinará 6.500 millones de euros a la recompra de acciones. No deja de ser la solución del adinerado impotente. Nadie se atreve con ampliaciones de capital (bueno, salvo Galán) y dividendos al alza. La recompra de acciones, menos títulos para contentar, revela miedo al futuro. En cualquier caso, una medida que el accionista, tiende a agradecer... lo cual resulta llamativo porque, créanme, el Santander nunca ha tratado demasiado bien al accionista.