BBVA y OpenAI llevan casi dos años trabajando juntos y fruto de esa colaboración anunciaron este viernes un acuerdo para “redefinir la banca con Inteligencia Artificial”, según dice el comunicado. El objetivo es transformar la experiencia de cliente, habilitando nuevas formas de trabajar y optimizando la operativa interna del banco.
“Fuimos pioneros en la transformación digital y móvil, y ahora nos adentramos en la era de la IA con una mayor ambición”, afirmó Carlos Torres, presidente del BBVA, durante el anuncio del acuerdo en la sede de Open AI, en San Francisco.
Efectivamente, el BBVA comenzó la digitalización mucho antes que el resto del sector, tanto que ni siquiera el entonces presidente del banco, Francisco González (FG) sabía muy bien en qué consistía. De hecho, al cabo de unos años admitió errores y tuvo que dar un giro estratégico a la citada digitalización.
Luego, en 2021, llegó el ERE que supuso la salida de 2.700 empleados en España y el cierre de 480 oficinas, aunque lo cierto es que el banco llevaba años ajustando la plantilla con una media de 700 salidas anuales.
Este acuerdo pionero con OpenAI permitirá, entre otras cosas, “crear un asistente conversacional e inteligente capaz de acompañar a las personas en su día a día financiero, estableciendo un nuevo estándar de relación con el cliente que permitirá ofrecer un servicio diferencial”, explica el banco. Un apunte: la IA, si es inteligencia no es artificial y si es artificial no es inteligencia.
Otra novedad que llama la atención: la herramienta creará un ‘alter ego’, un ‘segundo yo’ digital de cada empleado, “proactivo, que aprende el estilo de cada empleado, recuerda sus proyectos y ejecuta tareas, siempre con la autorización y control del empleado”, afirma el comunicado. Novedoso, ciertamente, y un punto inquietante.
A lo que vamos: la digitalización de segunda generación permitirá a Carlos Torres ajustar aún más la plantilla y acercarse al objetivo que anunció allá en 2016, cuando todavía era consejero delegado: que en un futuro el banco podría funcionar con 1.000 oficinas. Actualmente mantiene abiertas unas 1.800, en España.
Me dirá que lo que provocará el acuero con OpenAI es que cambie el perfil del empleado del banco, cada vez menos financiero y más tecnológico. Eso ya viene sucediendo desde hace años. La cuestión ahora es que la IA también permite prescindir de esos perfiles más tecnológicos. En cualquier caso, estamos hablando del BBVA en España. Llegado el momento, habrá que ver si aplica ajustes en Turquía y México.