Últimamente se ha conocido la noticia de que el Departamento de Justicia de Estados Unidos (EEUU) ha presentado una demanda civil contra Volkswagen AG (VW) por la supuesta violación de la "Clean Air Act", popularmente conocida como "Ley de Limpieza del Aire". El motivo sobre el que se basa consiste en la instalación de elementos en los vehículos del fabricante que tienen por objetivo la distorsión del control de emisiones, tal y como recogen desde Spiegel. Una demanda que inicialmente fue presentada y registrada en Michigan y que ahora ha sido transferida a California donde se ha iniciado el desarrollo de las acciones judiciales pertinentes contra el fabricante alemán de automóviles. Actualmente son varios los bufetes que se encuentran preparando demandas colectivas de los clientes perjudicados por el escándalo, así como contra personas del grupo en EEUU. De acuerdo con las informaciones facilitadas la demanda podría costarle a Volkswagen hasta 18.000 millones de dólares. Lo cierto es que ni siquiera los abogados más experimentados se atreven a predecir el resultado de este procedimiento legal. La razón reside en la mencionada "Ley de Limpieza del Aire", aprobada en 1963 en la que se incluye una exención para la industria del automóvil sobre la que Volkswagen podría estar trabajando para evitar en todo lo posible las peores consecuencias. VW admitió ante la Agencia de Protección del Medio Ambiente de EEUU haber equipado sus vehículos con un software ilegal. Esto se traduce en unos filtros que en el uso diario presentan disfunciones ya que aumentan el consumo de combustible reduciendo el rendimiento. El procedimiento está en marcha y parece que están dispuestos a llegar hasta las últimas consecuencias. Así lo ha manifestado John Cruden, asistente general de la Abogacía del Estado que ha dejado claro que EEUU "procederá con todas las medidas apropiadas para que Volkswagen compense las violaciones a las leyes de la limpieza del aire de nuestra nación". Clemente Ferrer clementeferrer@clementeferrer.com