Se dice que la droga intensifica el sentido del gusto y del olfato de quien prueba esta sustancia. Razón de más para que la marca holandesa de café Moyee haya decidido emitir un spot en el que los participantes,en una cata de café, se encuentran con una singular estrella invitada: el cannabis. En esta singular cata de café los participantes son invitados a fumarse un porro antes de degustar una taza de café para que, bajo la influencia del cannabis, legal en Holanda, puedan disfrutar de todos los matices aromáticos de esta bebida. Quizás con sus sentidos de gusto y del olfato más agudizados que nunca, los participantes ofrecen respuestas de lo más curiosas para describir del café que han degustado. Un joven utiliza los adjetivos "redondo", "triangular" y "ondulado" para describir el sabor del café de Moyee. Esta rompedora campaña publicitaria lleva la firma de la Agencia 180 Ámsterdam que no ha tenido en cuenta que la droga, cuanto más se consume más imperiosamente se necesita, el vendedor engaña al incauto comprador con que le llevará al paraíso, pero se calla el precio que deberá pagar: su propia autodestrucción, el deterioro físico y psíquico, que transformará, el paraíso de unos instantes, en un prolongado e insoportable infierno. La adicción a las drogas es la muerte, la inmolación de millones de seres humanos ingenuos e inocentes, en aras de uno de los más sucios y miserables negocios que ha conocido la Humanidad. Es importante conocer que la droga llega directamente al cerebro. El estudio de la Oficina Nacional de Control de la Drogadicción de Washington, afirma que las drogas pueden producir daños como zozobra, melancolía, brotes psicóticos y tendencias al suicidio. "He visto a los más grandes espíritus de mi generación, arrastrarse de madrugada por las calles, en busca de la droga urgente imperiosa", afirma el escritor norteamericano Allen Ginsber. Por otra parte, "El uso de la droga inflige muy graves daños a la salud y a la vida humana, fuera de los casos terapéuticos, es una falta grave", afirma el Catecismo de la Iglesia Católica. Clemente Ferrer clementeferrerrosello@gmail.com