Tenemos dos noticas que se entienden mejor si se cuentan juntas. Por un lado nos vamos a Alicante: PP y Vox acuerdan poner en marcha una "oficina de asistencia a la maternidad", pocos más datos se saben de la iniciativa, pero las asociaciones feministas alicantinas se han echado a la calle para protestar por lo que consideran una "oficina antiaborto".

“Frente a las apariciones en prensa de la exigencia de un servicio antiaborto y antes de que efectivamente eso se concrete, hemos preferido salir porque nos parece de una envergadura brutal que se hable de semejante cuestión”, resume Emilia Caballero, abogada feminista y cofundadora de la Asociación de Mujeres Juristas Themis.

Y ahora nos vamos a Argentina: Amnistía Internacional, sí, los chicos que hasta hace dos días eran provida, pero que ahora aseguran que el aborto "salva vidas", denuncian: "El mensaje llega por WhatsApp. Es de noche. Ceci, una empleada de casas particulares, lo recibe en su celular. Está embarazada y no quiere continuar con la gestación. Lo comentó en un Centro de Atención Primaria de San Miguel. Tiene cuatro hijos y no quiere otro más".

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"Pensó que la ayudarían a acceder a un aborto. Pero no deja de recibir mensajes e imágenes de fetos. En el municipio de San Miguel llevan adelante una política pública hace una década que consiste en detectar y perseguir a mujeres embarazadas para que no aborten".

"Les pasan videos con supuestos abortos sanguinarios para asustarlas y les prometen ayuda económica, pañales y ropita para el bebé. También una salida laboral con oferta de capacitaciones en peluquería o cocina, si llevan los embarazos a término".

Por si fuera poco, podemos recordar la indignación que sufrió el diario de Escolar, escandalizado con Vox Cáceres por proponer “crear una ayuda universal por nacimiento o adopción para impulsar la natalidad en nuestro municipio”. 

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Es que no hay nada más fascista y extremo que proporcionar ayuda a mujeres que quieren ser madres. Porque recuerden que, en la mayoría de casos, a la madre que se le ofrece ayuda, decide continuar con su embarazo. Pero claro, es mucho más feminista el aborto. 

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