Apela en su discurso a El Quijote y al Deuteronomio

 

Mucha expectativa sobre el discurso de Zapatero en el Desayuno de Oración. Al final, ha reiterado su herejía preferida: es la libertad la verdad cívica, la que os hará verdaderos. Es decir, nuestro capricho y deseo como fuente del derecho. Por eso apela a la necesidad de defender la libertad de formar una familia con quien se ama. Matrimonio homosexual. Y todo ello justificado en El Quijote: La libertad, querido Sancho, es el más preciado don que los cielos dieron a los hombres. Cierto, sólo que la libertad entendida como verdad, no como libertinaje ni como capricho.

Por lo demás, ha echado mano del Deuteronomio, 24 para reclamar un trato justo de los trabajadores. Ha apelado a la necesidad de acoger a los inmigrantes, de solidarizarse con el tercer Mundo. Nos reconcilia con nuestra naturaleza vulnerable y fraterna. Y por supuesto, ha reforzado su compromiso con los parados en dirigir todos sus esfuerzos en luchar contra el paro.

Previamente ha alabado a Estados Unidos por abolir la esclavitud, defender los derechos humanos y eliminar todo tipo de discriminación. De España ha dicho ser una nación (no discutida) judía, musulmana y cristiana, sobre todo cristiana. Muy sorprendente.