Publicamos la carta del distribuidor del libro Yo aborté, seguida de las respuestas del director de Información, Luis Losada y del director de Hispanidad, Eulogio López.

Muy señores míos:

Tal y como me indicó el Sr. López en nuestra interesante conversación telefónica del día de hoy, se ha publicado una Carta del Director, en el Diario Digital Hispanidad, que respeto totalmente, pero que, en lo que a las alusiones directas hacia mi persona respecta, debo realizar las siguientes precisiones:

Primero : Sobre el párrafo En la información se decía, de forma casi sibilina, casi escondida, por aquello de no hacer daño, que la propia distribuidora, Laberinto (sin citar nombres) reconocía que eran motivos ideológicos los que estaban detrás de la censura de FNAC., la verdad es que me sorprende escuchar palabras como sibilina o escondida. Evidentemente se han puesto en boca de Laberinto DL una serie de afirmaciones que, repito, por parte de mi empresa, no se han producido. Citan ustedes a Dª Sara Martín, de la AVA, como persona que ha transcrito los testimonios que figuran en el libro Yo aborté. Pues bien, Dª Sara y yo tuvimos una conversación en nuestra caseta de la feria del Libro, en el transcurso de una firma del citado libro (nos volcamos en la promoción del libro) en la que intercambiamos datos sobre la distribución del libro y la promoción que del mismo se estaba haciendo. En ningún momento, y puedo asegurarlo y ratificarlo tras la conversación telefónica mantenida hoy con Dª Sara, mencioné el hecho de que FNAC no hubiera adquirido los libros de Yo aborté por motivos ideológicos.

Segundo : Sobre el párrafo La verdad es que la carta del distribuidor nunca ha llegado a Hispanidad, por lo que supongo que don Jacobo, de Laberinto Distribución, se vio forzado por FNAC a redactar tan mentirosa misiva. De esta forma se evitaba el sonrojo frente a nuestro periódico el sonrojo de negar unas declaraciones que sí había realizado al tiempo que salvaguardaba su imagen ante uno de sus mejores clientes. Pero en Hispanidad amamos tanto la transparencia que les vamos a enseñar la dichosa misiva. Recuerden: nuestro lema es divertir instruyendo. Eso sí, reproducimos el texto que FNAC está enviando a los clientes en calidad de prueba irrefutable: debo indicarles que:

a)     La carta fue dirigida a la dirección de correo hispanidad@hispanidad.com dirección que salta en el correo electrónico en el apartado de Queremos conocer tu opinión de la página principal. Es más, creo que tengo la confirmación de lectura en el Terminal de mi despacho que muy gustosamente les remitiré. Me extraña que hagan referencia a la falta de recepción de la misma. Ustedes mismos me indicaron que enviara mi carta a esa dirección, guiándome a través de su página web.

b)     En ningún momento me vi forzado por FNAC a escribir ninguna carta.

c)     La carta no se trata de una mentirosa misiva sino que responde a mi experiencia personal con FNAC durante año y tres meses de relación comercial.

d)     La imagen ante sus clientes se la gana uno día a día. Ni existía sonrojo ante el periódico ya que negué unas declaraciones que, simple y llanamente, no eran correctas, ni ante mi cliente, ya que cuando se va con la verdad por delante no hay nada que temer, pero sí que aclarar para que todo quede en su sitio correspondiente.

e)     El texto, salvo el encabezamiento del mismo dirigido a Hispanidad a la atención de D. Eulogio López que no aparece en este reenvío por parte de FNAC pero sí en mi envío original a Hispanidad, está escrito personalmente por mí y es el texto original y correcto. Creo que en el mismo queda meridianamente claro que respondo por alusiones a la parte que me compete sin entrar en el fondo del artículo, el cual respeto dentro de la libertad de prensa que, a Dios gracias, tenemos en nuestro país.

Tercero : Sobre el párrafo Lo cierto es que don Jacobo Vidal, en persona, sí habló con Hispanidad, motu proprio la primera vez e intentando templar gaitas la segunda y la tercera. La primera vez habló con Sara Martín, a quien en la Feria del Libro advierte que en FNAC sostienen que el aborto es un tema religioso y que ellos nos distribuyen ese tipo de libros. debo manifestarles que:

Como he mencionado más arriba, ratifico que en ningún momento en mi conversación con Dª Sara mencioné problemas de índole ideológica para no comprar el libro. Evidentemente, en FNAC hay sección de libros religiosos, no la más extensa, pero sí representativa. Evidentemente, no es la línea de libros de más venta en términos absolutos. Sin embargo, estoy de acuerdo en que la temática del libro Yo aborté no es religiosa (ensayo) sino testimonial de un grupo de mujeres que relatan, de forma dramática su íntima experiencia al haber sufrido un aborto provocado. Pero, repito, de la misma editorial que nos ocupa, FNAC ha adquirido dos títulos de índole religiosa, respaldados por entidades tan valoradas como la universidad San Pablo CEU, la universidad Francisco de Vitoria, Abat Oliva de Barcelona y otras. Me refiero a los títulos Barioná. El hijo del trueno donde un ateo como Jean Paul Sartre cuenta a través de una obra teatro, el misterio de la navidad de forma magistral (sí, Sartre, existencialista, pero preso en una cárcel de concentración nazi, organiza una representación cultural para la época de navidad) y a Ciencia y Fe. Relaciones de complementariedad donde se relata como ambas no son antagónicas sino, más bien, complementarias. Libro religioso y de calidad.

Cuarto : Sobre el párrafo Además, el señor Vidal, en conversación mantenida el martes, cuando ya se había publicado la noticia, con el jefe de Información de Hispanidad, Luis Losada, insistió en que a él no le dijeron en FNAC que le hubieran censurado el libro por motivos ideológicos, pero que a lo mejor había sido por eso. debo comentar que:

Es cierta la conversación con D. Luis Losada. Es cierto que le negué que me habían indicado en FNAC que había sido por motivos ideológicos. No entro en más comentarios ni a valorar el artículo. Si FNAC ha decidido no coger el libro Yo aborté por motivos ideológicos es una hipótesis que Hispanidad ha puesto sobre la mesa, no Laberinto Distribuidora, ya que no le consta. Si D. Eulogio López ha tenido un veto personal, según me ha manifestado, para poder intervenir en FNAC, no lo pongo en duda, pero sigue sin ser un problema de Laberinto Distribuidora. Sólo me he centrado en el apartado de alusiones directas a nuestra actividad profesional. No voy a entrar a valorar o comentar el resto de afirmaciones, ya que no me corresponde como Consejero de esta empresa.

Quinto : Sobre el párrafo Ese mismo día, en conversación con el abajo firmante, servidora de ustedes, asegura que FNAC es un gran aliciente, y que aunque puede estar de acuerdo con nosotros, no puede asegurar que FNAC haya vetado Yo aborté, y aunque no tiene la delicadeza de no aludir a la falta de espacio, me indica que no puede saber las razones.

No toda la verdad es demostrable, al menos empíricamente, pero intuyo que el señor Vidal ha sido presionado por FNAC para escribir una carta que ni tan siquiera ha remitido. Lo que ocurre, es que no convine jugar con la credibilidad de un medio de comunicación, porque el crédito periodístico es como el pudor: se tiene de nacimiento, pero cuando se