Sr. Director:

Es ya un tópico decir que la historia se repite. También es común escuchar decir a los profesores de historia a sus alumnos que es importante estudiar su asignatura porque hay que aprender de los errores cometidos en el pasado. Pues bien, esto tantas veces oído parece que lo olvidan algunos políticos cuando llegan al poder.

Repasemos un poco la historia de España. Corre el año 709. Ha muerto Witiza, rey visigodo de Hispania. La monarquía por aquellos tiempos es electiva y no hereditaria, por lo que los nobles pueden elegir al rey que ellos quieran. Los nobles deciden erigir rey al conde de la Bética, don Rodrigo. Los herederos de Witiza, conocidos como witizanos, no aceptan la elección y empiezan las luchas por el poder. Pasa el tiempo y aprovechando que don Rodrigo debe marchar con sus soldados al norte a luchar contra los vascones, los witizanos se dirigen a buscar ayuda al norte de África para derrocar al rey. Musa ben Nusayr, wali (gobernador) de ese territorio, Ifriquiya, ordena a su teniente Tariq ibn Ziya, gobernador de la ciudad de Tánger, que cruce el estrecho de Gibraltar.

Al fin, Tariq cruza el estrecho en el año 711 d.C. al mando de 10.000 guerreros, en su mayoría beréberes del norte de África. Aprovechando la ausencia de don Rodrigo, inicia la invasión, sin resistencia de la pob lación. Don Rodrigo se enteró de la llegada del enemigo y regresó apresuradamente hacia al sur, reunió su ejército, y se enfrentó a las tropas de Tariq en la Batalla de Guadalete. Don Rodrigo fue vencido y murió en esta batalla. Ese fue el fin del reino visigodo de Hispania. Las tropas musulmanas, con Tariq a la cabeza, llegaron hasta Toledo que les abrió las puertas.

Habiendo resumido mucho esta cuestión, vemos como la llegada de los musulmanes a España y su fácil conquista fue gracias a que los contrarios al rey decidieron pedir ayuda musulmana, y como consecuencia, estos ya decidieron no irse de la península teniendo como consecuencia 781 de dominación musulmana. Pues bien, algo parecido esta ocurriendo en España. El gobierno de Rodríguez Zapatero cree que sus amigos son los enemigos de sus enemigos. Es decir, cree que favoreciendo la creencia musulmana acabará con el cristianismo e imponiéndose su ansiado laicismo.

Por tanto, señor Zapatero, tenga cuidado pues a la vista está con que haya estudiado un poco de historia que esto le puede ser muy peligroso. Es paradójico que quiera implantar un laicismo radical ayudado por estas personas que a la vista está que son fundamentalistas religiosos que en tierras de infieles se radicalizan de mayor manera. Lo anterior dicho antes, unido a los bajos índices demográficos que tiene España que no permiten tener un relevo generacional propio más la crisis de fe (crisis de fe que también tuvieron los obispos hispanogodos al defender la herejía adopcionista en tiempos de la conquista musulmana) hacen que España sea un país especialmente vulnerable para que la historia se vuelva a repetir, para que caigamos en la misma piedra que nos hizo tropezar en el 711.

¡¡¡Cuidado, señores, cuidado!!! Algunos prefieren tener a los musulmanes como amigos, pero lo que no saben es que los musulmanes decapitan a aquellas personas que se declaren homosexuales, lo que parecen olvidar algunos es que ellos son capaces de matar si te metes con su Dios, lo que parece que algunos no recuerdan es que en Arabia Saudí por llevar un crucifijo o hacer proselitismo cristiano uno está condenado a la pena de muerte, lo que pasan por alto es que en muchos países musulmanes se sigue lapidando a mujeres por ser infiel a su marido, lo que no quieren ver es que estos musulmanes lo único que tienen como bandera es la media luna y no la bandera española. En fin, señor Zapatero, creo que la estrategia de hacerte amigos de los enemigos de tus amigos le puede salir muy cara a mi querida y amada España.

José Miguel García Rodríguez

josemigr86@hotmail.com