Su muerte se une a la reciente de Amy Winehouse por causas similares

 

La cantante Whitney Houston ha muerto de una combinación de fármacos y no ahogada, como se apuntó en un primer momento. Fuentes de la investigación han informado a la familia de que la estrella consumió un medicamento llamado Xanax -un ansiolítico-, otras medicinas prescritas por médicos y alcohol, informa la web TMZ, de información de famosos. Este portal cita a fuentes de la familia de Houston, recogía El País.

La muerte de Houston se une a la reciente de la también cantante Amy Winehouse el pasado 23 de julio de 2011 por razones similares: tras sufrir un shock por un consumo excesivo de alcohol tras un periodo de abstinencia. Un caso muy similar, guardando las distancias al de Michael Jackson, fallecido como consecuencia de una sobredosis de fármacos administrados por su propio  médico. 

¿El precio de la fama?, ¿no saber asimilar el éxito?

En cualquier caso, una pena que gente con esos dones no haya sabido encontrar un sentido a su vida.

Andrés Velázquez
andres@hispanidad.com