Me encanta www.iesvs.org porque es una página sin complejos. Explica las viejas y absolutas verdades catequéticas (recuerden: si es verdad es absoluta, si es verdad es permanente y si no es ninguna de las dos cosas, no es verdad).

Su explicación de la unigénesis es tan sencilla como genial o es genial porque es sencilla.

Y modesta, por cuanto la ciencia no ha hecho otra cosa que dar sentido al relato de Adán y Eva. No hace falta recurrir a la doble verdad, porque la verdad es absoluta, es eterna y es una... o no es verdad) sino a las teorías sobre la Virgen de África, cada vez más asentada entre los estudiosos a pesar de la presión mediática de la evolución, teoría contra la que, por otra parte, la Iglesia nunca ha tenido nada que oponer, si acaso de matizar. El Cristianismo sólo precisa que, venga el cuerpo del hombre de donde venga, en un momento dado de la historia, Dios concede a una pareja un alma racional, ergo libre; un alma espiritual, ergo eterna. Es la ciencia la que ahora se enfrenta al amigo Charles, porque su modelo no encaja con la realidad.

En cualquier caso, el problema de la verdad moral es que es muy exigente: absoluta, eterna, y única. Y por cierto, lo de moral es un adjetivo perfectamente suprimible.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com