Sr. Director:
Al grito de "¡Viva la huelga general!", los sindicatos UGT y Comisiones Obreras (CC.OO.) protagonizaron el domingo, día 11 de marzo, una serie de manifestaciones de protesta en toda España contra la reforma laboral del Gobierno.

 

Es cierto que las organizaciones sindicales están en todo su derecho de utilizar los medios que la ley pone a su alcance para protestar contra las políticas que les parezcan
oportunas.

Ahora bien, UGT, CC.OO. y los partidos de los cuales son correa de transmisión (PSOE e Izquierda Unida), que se han sumado a las pancartas, no se pueden extrañar de que su actitud sea la causa misma del descrédito que sufren entre una buena parte de la población a la que dicen representar.

A ello ayuda el hecho de que las manifestaciones del día 11 y la general que están ensayando, se hayan producido antes de cumplirse 100 días de la llegada del PP al poder; que antes, sin embargo, predominara el silencio, cuando no la colaboración descarada con el Gobierno socialista que nos ha arrastrado a una pavorosa situación económica y social; y ayuda también, el que habiendo tenido muchos años y muchas fechas para hacerlo, se hayan colgado del 11 de Marzo, trasladando la imagen a la
sociedad de que para algunas organizaciones, las víctimas del terrorismo necesitan ser utilizadas y adscritas a determinadas reivindicaciones políticas para ser en verdad reconocidas y homenajeadas, al mismo tiempo que dividen a las asociaciones que
representan a las mismas víctimas.

Todo eso, sencillamente considero que "no tiene nombre".

Pedro J. Piqueras Ibáñez