Sr. Director:

El barrio con el que soñé al comprar mi vivienda cada vez se vuelve más irreal ¡cuando debía ser todo lo contrario! Normalmente, una persona que se compra su piso de nueva construcción tiene que sufrir la escasez de servicios en un barrio que está aún por hacer, pero todo se asume con ilusión por todo lo bueno que vendrá después.

En el caso del barrio de Montecarmelo, las esperanzas por un barrio bonito, alegre, tranquilo, al lado del campo (con el Monte del Pardo al lado) lejos de la contaminación, se tornan cada vez más lejanas... Cuando elegí el barrio de Montecarmelo para comprar mi casa, lo hice con la idea de vivir allí toda la vida, de tener hijos, formar una familia y ser feliz.

Todas estas ilusiones se desvanecen el 19 de enero de 2006, cuando la Junta de Gobierno de la ciudad de Madrid publica un Acuerdo con el Plan Especial de ordenación urbanística del barrio. Dicho plan tiene por objeto la creación de un crematorio y tanatorio en la parcela que está detrás del antiguo cementerio del Barrio de Fuencarral de Madrid.

Numerosos estudios y artículos de expertos han denunciado los efectos nocivos que producen las emisiones de los crematorios de cadáveres: dioxinas, furanos, mercurio, etc. Sustancias, todas ellas, relacionadas con el desarrollo de cáncer en las personas que habitan cerca de estas instalaciones de la muerte, en el sentido mas amplio de la expresión, y es más, está demostrado que no es posible técnicamente impedir su emisión.

Tenemos que impedir que este Plan Especial salga adelante, por el bien de nuestra salud y la de nuestros hijos. Somos un barrio joven, que necesita esa parcela para todos los niños que van a vivir en él. Hoy en día que las Administraciones están como locas por encontrar una solución al 'botellón' no entiendo cómo no ofrecen alternativas a la juventud. Señores, hagan unas instalaciones deportivas en esa hermosa parcela que está detrás del antiguo cementerio, pero no procedan ni siquiera a la ampliación del mismo.

Nos negamos rotundamente a la ampliación del cementerio y a la creación de un tanatorio y crematorio, porque este barrio necesita unos servicios más acordes con el mismo : hagan un polideportivo, un parque para que puedan jugar nuestros hijos, un centro de salud que dé cobertura al barrio, que ahora mismo no tenemos ninguno, y llévense la instalación de la 'macro necrópolis' que pretenden hacer, a una zona no residencial. Como ciudadanos y como contribuyentes tenemos nuestros derechos.

Al igual que pagamos impuestos y muchos hemos pagado ya al adquirir nuestras viviendas en este barrio, tenemos el derecho a exigir que nuestro dinero se invierta en lo que nosotros, como vecinos, consideremos que necesita el barrio, y desde luego, que no queremos que esa parcela (que cuando adquirimos nuestras viviendas estaba destinada a ser 'protección del cementerio'), se destine a una ampliación del cementerio, puesto que deja abierta la posibilidad de convertirse mañana en un crematorio que nos vaya matando lentamente. Nos estamos organizando en www.paumontecarmelo.com

Nicasio Ruiz Fillol

kanguro@jazzfree.com