Sr. Director:

La objeción de conciencia en la realización de las uniones civiles entre homosexuales debe ser un derecho pero hay que ser fuerte y consecuente. Quiero recordar que en el siglo XVI el rey de Inglaterra Enrique VIII tuvo un enfrentamiento serio con Tomás Moro, el cual, apelando a su conciencia, no quiso ratificar la separación del rey con Catalina de Aragón. Ya sabemos como terminó el conflicto : El rey mandó decapitar a Tomás Moro por obedecer antes a su conciencia que al rey. 

Amadeo Muntané Sánchez

muntanesanchez@yahoo.es