La enmienda a los Presupuestos Generales del Estado no cuenta, por el momento, con el apoyo de CiU y ERC, por lo que, en principio o podría salir adelante. Pero no se preocupen: saldrá.
Hablamos de una norma introducida con calzador en esa ley ómnibus que son los Presupuestos del Estado para forzar a RTVE a reducir un 25% sus ingresos por publicidad en horas de máxima audiencia. Es decir, que a una empresa a la que según unas fuentes gubernamentales le sobran 5.000 trabajadores, y según otras 3.000, que debe 7.000 millones de euros y que está llamada a la reconversión, aún se lo ponen más difícil políticamente. Ello beneficiará al actual oligopolio, formado por A-3 TV, Tele 5 y Polanco, más los nuevos invitados, con dos canales, que serán El Mundo-Recoletos (Veo TV) y Vocento (Net TV), además de Globomedia y Mediapro. El más beneficiado de todos por el palo a RTVE, será naturalmente, Jesús Polanco.
A-3 TV y Tele 5, beneficiados por la mutilación de RTVE, están tan contentos que no impugnarán la apertura de Cuatro : Zapatero les ha convencido. Pero no sólo eso, asimismo se libran de la amenaza del ministro de industria, José Montilla que era, si cabe, más eficaz: Montilla amenazaba con sacar a concurso público 10 canales digitales, que se restarían de los que se van a conceder a Lara, Berlusconi y Polanco, y a Pedro J. Ramírez y Vocento. Eso sí, a cambio, además de no impugnar a Polanco, los susodichos deberán tener sus cuatro programaciones en marcha el 2 de diciembre (RTVE, A-3 TV- Tele-5 y Sogcable) y dos en el caso de Veo TV y Net TV.
En definitiva, Zapatero ha decidido mantener el oligopolio, que resulta mucho más manejable, y no aumentar el pluralismo informativo en España. Así consigue que ningún medio poderoso sea demasiado duro con él.
