Sr. Director:
En la producción de tomates se generan muchas hojas y tallos de las tomateras que hasta ahora se han venido destinando a la elaboración de compost.

Los investigadores de la Universidad holandesa de Wageningen han previsto un uso alternativo: utilizarlos para empaquetar los propios tomates.

Han desarrollado un proceso para elaborar un embalaje a partir de hojas y tallos de la planta de tomate, que incluso huele a tomate. Además, de esta forma se consigue también reducir la huella de carbono de la producción de este vegetal.

La Universidad ha llevado a cabo esta iniciativa junto con la interprofesional holandesa de las frutas y hortalizas y un par de empresas encargadas de la producción de embalajes. Los investigadores también están trabajando en la posibilidad de utilizar los tallos de las tomateras para la producción de cartón.

En la Universidad de Wageningen hay un gran interés en la Economía con base biológica, ésta es una economía en la que las empresas convierten la biomasa en productos, sustancias químicas y energía.

Una iniciativa que aplaudimos y que esperamos que cuando sea una realidad a gran escala, los consumidores lo sepamos agradecer.

Domingo Martínez Madrid