Y se desespañoliza. Nace Telefónica Digital (TD), la empresa destinada a transformar la operadora en un portal... y en todo lo que se desarrolle en la WWW: ¿También contenidos? Eso sí, será más Google que Apple. Al frente de la nueva TD, Alerta ha situado a Mathew Key, el británico que llevaba O2, con sede central en Londres. Por áreas geográficas, se crean las dos divisiones: Europa y Latinoamérica. Al frente de la primera, Pallete; en la segunda, Vallbuena. Ansaldo se queda con Medios para todo el mundo

No se le puede dejar irse de vacaciones. El presidente de Telefónica, César Alierta, ha regresado a Madrid y le ha dado la vuelta a la compañía. Recomposición total de los organigramas personal, geográfico y temático de la primera compañía española.

Lo más importante: nace Telefónica Digital (TD), para todas las actividades relacionados con la red. Vamos, que Telefónica se ha cansado de ser un transportista de señal para que el negocio lo hagan los googles. Ahora quiera ser Google. Bueno Google y todo lo demás.

Lógico: los portales transmiten la información por las operadoras sin los operadores. Además, la telefonía de voz se muere por la irrupción de la voz-IP, de la misma forma que la TV digital o por cable morirá a manos de la TV-IP. Ahora bien, cuando se habla de un portal podemos estar refiriéndonos a un canalizador de contenidos –no de señal- o a un productor de contenidos. ¿Entrará Telefónica en contenidos? La lógica que impone la tecnología le lleva a ello, pero también es verdad que ha aliado escaldado del mundo mediático y de Endemol.

Por cierto, Telefónica quiere ser Google, pero, por el momento, no Apple. Lo cierto es que todos los segmentos del mundo digital, tanto de forma como de fondo, tienden a confluir.

Lo peor: la sede de la nueva Telefónica Digital estará en Londres, con subsede en Madrid. La operadora española de referencia, teleco de bandera, coloca la sede corporativa de su filial de futuro a Londres. Muy mal. Se trataría de castellanizar la red, no de britanizar TD.

Al frente de la nueva firma estará el británico Mathew Key, hasta ahora al frente de O2, la filial británica. Key apenas habla español.

Otros dos cambios: redistribución geográfica: ya sólo habrá dos divisiones, Europa e Iberoamérica. España se queda como una filial de la gran división europea. En definitiva, otro grado de desespañolización de Telefónica. Al frente de la división europea se sitúa quien ahora llevaba Iberoamérica, es decir, Álvarez Pallete. El presidente de Telefónica de España, Guillermo Ansaldo, se convierte en director de Medios, unidad global que, como todas las divisiones de medios, tendrá mucho poder y poca influencia.

Respecto a Telefónica Latinoamérica (¿No podía marcharse Telefónica Hispanoamérica, caramba?) se queda con ella Santiago Fernández Vallbuena, el director financiero que ahora será sustituido por Ángel Vilá. 

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com