Sr. Director:
Era una auténtica delicia sentarse con Antonio (D. Antonio Vázquez, perdón) en las noches cordobesas, a la vera de la muralla del barrio de la judería y oírle cantar. Torna a Sorrento era la que a mí más me gustaba y Alfredo Kraus su ídolo.
Tuve la enorme suerte de su amigo durante nuestra infancia y juventud cordobesa, ahora este Madrid de nuestro bussines nos permite vernos muy poco. Escribo esta breve nota para ampliar su información en otra faceta de Antonio.
Fue un excelente deportista (continúa teniendo una silueta envidiable, porque se cuida) hasta el punto de que fue el mejor candidato para sustituir a Miguelín Reina en la portería de nuestro Córdoba C. F (¡¡de nuestras desdichas!!) y el balonmano, y el baloncesto, a todo le daba y le daba bien. Fue una fortuna compartir con él aquellos maravillosos años de la década de los 60 (ya vamos siendo mayores) porque además de un excelente profesional, todos sus amigos sabemos que lo mejor que tiene, es ser una excelente persona.
Bernardo Garrido
