El inversor Javier Tallada se marcha de la química Ercros, donde ha llegado a tener el 5% del capital. Dice que está harto de que su presidente, Antonio Zabalza, no dedique el suficiente tiempo a la empresa porque está obligado a vender el Estatut. Obligado en su condición de militante del PSOE y de ex secretario de Estado de Hacienda. Entre participar en debates políticos en los medios catalanes y escribir artículos en El País, Zabalza, según Tallada, no tiene tiempo para la empresa, que no puede decirse marche como un cohete.
El que en 1992 fuera nombrado secretario de Estado de Hacienda con Carlos Solchaga, pasaba por ser un político moderado, apenas preocupado por lo que ahora se llama cuestión territorial, pero ahora se ha soltado el pelo. Así, el 16 de octubre defendía en El País que el Estatuto -¡ojo!, no el de ahora, más aguado, sino el salido del Parlament- es un buen punto de partida y debería servir de base a la negociación que ahora se abre. Pues menos mal que era el punto de partida. Zabalza no nos dice hasta donde se podía caminar desde ese punto, pero es como para asustar, por lo menos a José Bono.
En cualquier caso, Tallada, que entra en Avanzit, como ya informara Hispanidad, ahora ha encontrado la excusa para irse de Ercros. Y es que el nacionalismo es vocación muy atareada, que exige muchas horas de esfuerzo. Más que Ercros.
