• La número dos del Gobierno se ha sacado de la chistera una carta del Colegio de Comisarios fechada en 2004 que corrobora la tesis de la vicepresidenta de la CE, Viviane Reding.
  • Esto es, el país que se independice queda fuera de la Unión Europea y las leyes del tratado no se aplicarán más en él. Tiene que solicitar de nuevo su admisión y ser aceptado por los Estados miembros
  • Sáenz de Santamaría ha evitado pronunciarse sobre si España, una vez independizada Cataluña, vetaría su entrada en la UE: "El Gobierno no habla sobre hipótesis. Espero que nunca llegue a pasar esto".
  • Ha criticado la improvisación de Mas, así como su escasa valoración de las consecuencias legales y las implicaciones de sus actos.
  • También ha criticado las declaraciones de Almunia, quien afirmó que Cataluña no tendría que salir forzosamente de la Unión Europea. "Se ha pronunciado sobre un ámbito que no es de su competencia", ha señalado.

La rueda de prensa posterior a un Consejo de Ministros, en que la medida aprobada más destacable ha sido la actualización de las normas sobre seguridad marítima, se ha convertido casi en un debate monográfico sobre Cataluña y su posible 'secesión'. La vicepresidenta ha alabado la postura de Duran i Lleida, presidente de Unió y secretario general de CiU (en la imagen), quien pese a defender tesis independentistas, "ha dicho a los catalanes la verdad, lo que hay sobre su exclusión de la UE si se produjera una escisión de España". El líder de Unió ha reconocido públicamente, al contrario que Mas, la validez de la carta de la vicepresidenta de la Comisión Europea, Vivianne Reding. Así, Durán ha dicho que Cataluña no tiene garantizada su entrada en la UE si se convierte en Estado propio ya que cualquier miembro de la Unión, no solo España, puede vetar su entrada.

Soraya Sáenz de Santamaría iba bien preparada. Llevaba entre sus papeles la respuesta del colegio de Comisarios Europeos a una pregunta formulada por Eluned Morgan, eurodiputada laborista galesa, en el año 2004. Morgan planteó por aquel entonces a la Comisión varias preguntas, entre ellas, si un Estado miembro se dividiera -por haber alcanzado una región la independencia- si esta región debería abandonar la UE, y presentar a continuación su candidatura con vistas a la reintegración.

Romano Prodi, entonces presidente del Colegio de Comisarios, contesta en la carta que "una nueva región independiente, por el hecho de su independencia, se convertirá en un tercer Estado en relación a la Unión y, desde el día de su independencia, los tratados ya no serán de aplicación en su territorio". Y además, añade: "Según el artículo 49 del Tratado de la Unión Europea, cualquier Estado europeo que respete los principios establecidos en el apartado primero del artículo 6 del Tratado de la Unión Europea podrá solicitar el ingreso como miembro de la Unión. Una solicitud de este tipo requiere, si es aceptada por el Consejo por unanimidad, la negociación de un acuerdo entre el Estado solicitante y los Estados miembros sobre las condiciones de admisión y las adaptaciones que esta admisión supone de los tratados. El acuerdo está sujeto a la ratificación por parte de todos los Estados miembros y del Estado solicitante".

A la vicepresidenta se le ha preguntado reiteradamente si España vetaría o no el ingreso de una posible Cataluña independiente. Por dos veces se ha negado a pronunciarse: "Porque espero que nunca llegue a pasar esto" y porque "el Gobierno no habla sobre hipótesis".

Si ha aprovechado para atacar con dureza a Artur Mas, quien desdeñó la carta de Reding, y ha achacado al dirigente nacionalista improvisación, escasa valoración de las consecuencias de sus datos y ausencia de reflexión sobre las implicaciones legales de los mismos.

La carta del Colegio de Comisarios a la eurodiputada galesa ha sido fotocopiada y distribuida a todos los medios presentes. No hay más cera que la que hay para Cataluña. Si quiere ser independiente tendrá que salir de Europa. Joaquín Almunia, el Comisario de la Competencia ha recibido también un pequeño varapalo por decir que "no es honesto decir que Cataluña quedaría fuera de la UE". Soraya no sólo ha blandido la carta de Reding y la del Colegio de Comisarios Europeos contra él. También lo ha dejado "en evidencia por pronunciarse sobre un ámbito que no es de su competencia". Asimismo, ha reclamado más claridad a los socialistas sobre su postura ante la cuestión catalana y "su federalismo" en un Estado como el español, que ya cuenta con un régimen autonómico.

Sara Olivo

sara@hispanidad.com