En la situación actual, el recorte del tipo del impuesto de sociedades tendría un coste de 4.000 euros, aunque según Solbes, si se mantuvieran las actuales deducciones, el coste se vería recortado a unos 2.000, que habría que sumar a otros 2.000 de la reforma del IRPF. En total: cerca de 4.000. Una cifra que tanto para Pepiño Blanco como para Miguel Sebastián resultan insuficientes. En todo caso, lo anunciado este viernes por el vicepresidente es muy superior a lo señalado en un reciente encuentro empresarial donde ya advirtió que más que recorte de impuestos, había rebaja de tipos.

No obstante, Solbes no se cierra a nuevas reformas, pero siempre con la cautela de no quebrar el equilibrio presupuestario y de garantizar por tanto la suficiencia financiera para poder afrontar la ambición de gasto de este Gobierno, especialmente en gasto social.

Por otra parte, como ya había sido anunciado, la reforma del impuesto sobre sociedades será gradual, pero el objetivo del Gobierno es la eliminación de todas las deducciones, incluida la de I D, reinversión de beneficios e internacionalización de las compañías. ¿Cómo se va a mantener la apuesta del gobierno sobre estos temas? Mediante ayudas directas, que según Solbes resultan más eficientes.

Por otra parte, Solbes señala que finalmente el gobierno ha renunciado al mínimo exento en capitales porque aunque tiene ventajas en términos de equidad, tiene también sus desventajas en términos de gestión.

Por último, en relación a la OPA y el comentario de Montilla sobre la politizaación del TDC, Solbes ha afirmado que respeta las instituciones y también los plazos. Así que, como informamos, Solbes agotará el plazo para presentar su informe que acaba el próximo 5 de febrero.