Como se entere César Alierta, presidente de Telefónica, seguro que les copia la idea a los hombres de Ángel Ron, presidente del Banco Popular. Verán, la ley de Sociedades Anónimas de 1989, afirma que no se puede negar la asistencia a la Junta de Accionistas al titular del 1 por 1.000 del capital. Nadie aplica la norma, y se permite la entrada y la intervención a cualquier accionista que se haya acreditado en tiempo y forma.

Pero no el Popular. El Popular sí que lo aplica. A ver, muchacho : la calculadora: un 1 por 1.000 del capital supone poseer unas 242.000 acciones. A precio de mercado, un patrimonio de 12 millones de euros (2.000 millones de las antiguas pesetas). Una cantidad respetable: hay algún español que no gana esa cantidad todos los fines de semana.

Hombre, también puedes formar grupo con otros accionistas hasta lograr ese número de acciones, pero no parece sencillo. Y, eso sí, puedes votar por Internet, aunque no participar, o bien -todos son facilidades en la sociedad de la información- delegar tu voto en el Consejo de Administración, opción que la dirección te posibilitará con gran entusiasmo.

Así que durante la reciente Junta General de accionista de la Entidad, resultó que de 88.000 accionistas acudieron unos cincuenta. Y lo que son las cosas: no hubo altercado alguno.