El Gobierno está razonablemente satisfecho tras la prórroga a las subvenciones europeas para el carbón. Así lo ve el ministro de Industria, Miguel Sebastián, que en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros de este viernes recordó que lo previsto era que las ayudas se acabaran en 2011.
Sebastián señaló que es el momento de realizar un plan 2011-2018 para adaptar la industria a un panorama sin subvenciones. Lo más probable es que Sebastián no sea ministro en 2018, así que no interesa entrar en conflictos con los mineros. La verdad es que para entonces el carbón no será capaz de sobrevivir por sí solo y será tarde para iniciar la reconversión. El trasvase de mineros a otros sectores debería comenzar ya, pero Industria prefiere conformarse con el corto plazo y sólo busca tranquilizar a los mineros para que no hagan barricadas al menos hasta 2018.
Mariano Tomás
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