La diputada popular, Sandra Moneo acusa al Gobierno de un sectarismo político que puede destruir 1.000 empleos Sesión de control de este miércoles. La diputada popular por Burgos, Sandra Moneo, interroga al ministro de Industria, Miguel Sebastián, por su criterio en relación al cierre de Garoña. Sebastián no se moja y afirma que comparte lo manifestado en el programa electoral: cerrar las centrales sólo al término de su vida útil y con la prioridad en la garantía de suministro y el mayor consenso posible. Los entrecomillados, obviamente, no forman parte del programa sino de la manera con la que un ministro pronuclear dulcifica el programa.
Moneo se comparece de un Sebastián que tiene que hacer tripas corazón y le recuerda que si Garoña se cierra será por criterios exclusivamente políticos. Acusa al Gobierno de sectarismo político que podría destruir los 1.000 empleos generados en Garoña y le pide mantener las nucleares aunque sólo para solventar el fiasco de las renovables donde se han perdido 40.000 puestos de trabajo.
Así las cosas, a Sebastián no le ha quedado más remedio que afirmar que el cierre de Garoña no predispone la posición del Gobierno en relación al resto de la energía nuclear. Incluso llega a afirmar que la nuclear es hoy por hoy insustituible en su conjunto para garantizar el suministro. Y termina lanzando un dardo envenenado: El asunto es tan complejo que Uds. cerraron Zorita. Patada en la espinilla.