Por tercer año consecutivo, la farmacéutica alemana Schering patrocina el autobús Sexo con seso en el que participa la Sociedad Española de Contracepción, la Federación Española de Planificación Familiar, y Cruz Roja Juventud. Paga Schering. Ergo manda. Una buena razón para que el presidente de la Fundación apareciera por el acto de manera discreta, sin molestar, pero controlando el cotarro.

Esta vez, el autobús durará tres meses visitando más ciudades que en ediciones anteriores y acudiendo a las islas Canarias por vez primera. Más dinero, porque la cosa marcha. ¿Por qué marcha? El discurso es el defendido por el lobby abortero español en los últimos meses: los jóvenes siguen manteniendo relaciones sexuales de riesgo en un 40% elevando peligrosamente las cifras de embarazos no deseados y de abortos provocados.

¿Cómo solucionarlo? Si, lo han adivinado. Píldora al canto y a correr. Los promotores del autobús o sea Schering- apuestan por el doble método, es decir, preservativo y píldora. De esa forma ganamos todos. Y más, piden a las administraciones públicas que se impliquen de manera más decidida en la promoción de programas de salud sexual y reproductiva, siguiendo el modelo de los países nórdicos. Además, han notado que cada vez que bajan las campañas se elevan los problemas, señala el director de la Sociedad Española de Contracepción, Ezequiel Pérez Campos. ¿Hay que insistir permanentemente?, preguntamos. Si, como en la seguridad vial, responde. Mejoramos nuestros indicadores sanitarios y caemos en los indicadores de salud sexual y reproductiva, señala.

¿No será que nos estamos equivocando en el sentido de la campaña como se apunta en varios estudios?, insistimos. Por supuesto, los patrocinados niegan la mayor. No, hay que insistir y llegar más lejos, porque el esfuerzo que estamos haciendo es insuficiente. O sea: exigencia de compromiso de las administraciones públicas para un supuesto fin social y un real fin mercantil.

Por supuesto, todos niegan que la PDD sea abortiva, se refugian en todo caso en la OMS que señala que el feto no esta asta que está implantado y tachan a quien no piense igual por ejemplo, al 100% de los libros de embriología españoles- de ideológico. La realidad se impone sobre toda ideología, por muy respetable que sea; una cosa es ciencias y otra ideología, apunta Pérez Campos. O sea, lo de siempre: consuma píldoras Schering y será feliz para siempre.