En mi partido, Bárcenas me habría durado 5 minutos, afirma el presidente navarro

Que el presidente de Navarra, Miguel Sanz, no quiera hacer sangre con los socialistas habida cuenta del pacto de gobernabilidad tiene un pase. Que quiera marcar distancias con el PP tras su divorcio, es entendible. Pero que se pegue un tiro en el pie, no hay quien lo entienda. En una entrevista publicada en El País, Sanz arremete contra Rajoy y afirma que en su partido, UPN, un caso como el de Bárcenas, le habría durado 5 minutos. Puntapié a la estrategia de D. Mariano de dejar que los problemas se le pudran.

Pero lo que no es entendible es la afirmación de que ha quedado demostrado que el gobierno no vendía Navarra. La macromanifestación  de Navarra no se rinde fue encabezada por su persona. No la montó el PP, sino que fue él quien le pidió al PP apoyo. El PP se lo brindó. Probablemente gracias a aquella manifestación no hubo un pacto PSE-NafarroaBai como se ha producido en Baleares o en Cataluña. Y resulta evidente que en medio de la negociación con ETA, Navarra era moneda de cambio. Era lo que los etarras señalaban como desatar los nudos.

Pues bien, el Sr. Sanz en lugar de estar agradecido o de permanecer callado, se pega un tiro en el pie. El tendrá que explicar por qué. Por cierto que con este debate sobre las cajas, Sanz, presidente también de Caja Navarra, afirma que es verdad, no se puede ser cargo electo y representante de una caja de ahorros. O dicho de otra manera: cuando me largue, me iré de presidente de Caja Navarra, que ya no soy cargo electo, pero sigo estando en el machito. Un crack de la coherencia este Sanz.