• Senén Touza (en la imagen) se vislumbra como el Ceo de la nueva Pescanova.
  • El Sabadell quiere tres años de tranquilidad: no habrá nuevas compras aunque sí entrada en México.
  • La economía va mejor y la entidad afronta un periodo de estabilidad de dos o tres años.
  • Oliú bromea con la coincidencia, el 9 de noviembre, de la convocatoria independentista y de los test de estrés de la banca.

El presidente del Sabadell, Josep Oliú, lo tiene claro: "Lo lógico, y así creo que sucederá, es que los bancos se hagan con la mayoría del capital" de Pescanova. Los bancos, no Demetrio Carceller.

Y eso que en el Sabadell siempre han apostado por el empresario de Disa y Damm, Sacyr, etc., pero ahora se sienten decepcionados. Tanto el Popular como el Sabadell, cabezas de serie de la banca acreedora, se sienten engañados. Por tanto, en línea con la doctrina Guindos, los bancos capitalizarán deuda. Es más, Oliú lo glosa así: "No se necesita un empresario propietario para gestionar Pescanova: se necesita un Ceo". Y en este caso el Ceo que más convence a la banca acreedora es el que adelantara Hispanidad y que ya está dentro de Pescanova y conoce el sector: Senén Touza. En cualquier caso, el jueves 27, Junta General de Accionistas del Banco Sabadell. Lo primero, lo último: los consejeros ejecutivos del Sabadell, aclara Oliú, cobran un 15% menos que el año anterior. Ya se sabe: sutil diferencia entre criterio de devengo o criterio de caja. Le creemos.

Entra en el capital del Sabadell David Martínez, el iberoamericano que sustituye a Isaak Andic. Pero no acude a la Junta. ¡Ay, ay! 

Oliú comienza aclarando que la pasada semana el Sabadell culminó la integración del Gallego y de Lloyd's. En tres años ha ganado cuatro millones del clientes, ahora son 6,5%, el 30% de su actividad en Cataluña.

Por cierto, bromea Oliú con el 9 de noviembre, fecha clave para los nuevos test de estrés y también para el referéndum independentista de Artur Más. Para mí que no se lo cree.

Oliú habla de un Sabadell estable durante dos o tres años. Vamos, que "nos vamos a dedicar a cuidar a los cuatro millones de clientes que no teníamos hace tres años". Y que no va a comprar más bancos.

Las grandes empresas están en proceso de intermediación, pero no las pymes.

La economía va mejor porque se está desapalancando -familia y empresas-, con un problema impresentable, eso sí, de la tasa de paro.

El Sabadell sigue pensando en un crecimiento del PIB del 1% para 2014. No es mucho, porque EEUU crece por encima del 2%. Mejorará la tasa de los márgenes.

El estrés test llegará por aquí el 9 de noviembre. "Entonces se despejarán todas las incertidumbres" (las del sector bancario y las secesionistas).

Más grave le parece la reputación corporativa de la banca tras la crisis. La tesis del presidente del Sabadell. Los malos han contagiado a los buenos de la mala imagen.

Interpretación de la crisis: "la crisis bancaria ha costado mucho dinero a los bancos privados, todavía no sé si le ha costado al Estado más de 80.000 millones de euros al conjunto de los bancos privados y otro tanto entre el Estado y los accionistas públicos, que eran los fondos patrimoniales de las cajas de ahorro". Me temo que se trata de cuentas demasiado anticipadas.

Gran objetivo: México. Solicitar la autorización para crear un banco desde cero. Toda una novedad: no compro, creo un banco. A lo mejor es lo más adecuado.

La productividad respecto a los costes salariales es mejor en España que en cualquier otro sitio.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com