Una vez más el vicepresidente del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, justificó la declaración de Eguiguren como una colaboración con los jueces, pese a que el hecho de que acuda a petición de la defensa de Otegi hacía sospechar cierta predisposición a favorecer al líder abertzale. Este viernes, Rubalcaba no tuvo más remedio que admitir que los abogados de Otegi pretendían beneficiarse de la declaración de Eguiguren, aunque en opinión del vicepresidente no lo han logrado. De paso, Rubalcaba cargaba contra el PP destacando que hay quien nunca cree las palabras de Otegi, salvo cuando perjudican a los socialistas.
La situación de Rubalcaba es complicada. Tiene que defender a Eguiguren, con quien mantiene buena relación y habla continuamente, al tiempo que manifiesta su total desacuerdo con él. El malabarismo de Rubalcaba se completa con una advertencia de que no permitirá el linchamiento del presidente de los socialistas vascos, en referencia al asedio del PP y las acusaciones de favorecer la excarcelación del portavoz de Batasuna. Rubalcaba tampoco cuestiona la permanencia de Eguiguren en la Presidencia del PSE, argumentando que se trata de un cargo elegido por los socialistas vascos.
Mariano Tomás
mariano@hispanidad.com
