• El sector privado ya se ha desapalancado; el público no. Pero los manifestantes siguen pidiendo en la calle más gasto público.
  • A pesar de los cambios legales, y por quinto año consecutivo, La Caixa dedica 500 millones de euros a obra benéfico social. Eso no lo hace ningún banco-sociedad anónima en España.
  • Y un extra de seis millones para promocionar el empleo y el autoempleo de los autónomos.
  • Las tres características de una caja de ahorros: crédito local, obra social y apoyo a la empresa.
  • Fainé, como Botín, no tiene la menor intención de jubilarse: "estamos en plena forma".

Para Isidro Fainé, presidente de Caixabank (en la imagen, junto al Ceo, Juan María Nin), 2012 ha sido el peor año de la crisis, al menos para el sector bancario. Mucho más optimista se mostró de cara a 2013 durante la presentación de los resultados 2012, para el ejercicio en curso pues "se han superado las tensiones extremos y el euro es hoy un proyecto más vivo que nunca… y la unión fiscal cada vez está más cerca".

Como siempre, Fainé dedicó especial interés a la obra benéfico social, porque aunque La Caixa, por imperativo legal, se tendrá que convertir en fundación-sociedad anónima, es decir, una fundación que posee un banco -y ya veremos por cuánto tiempo-, lo cierto es que el presidente de La Caixa es el único que pretende mantener el espíritu de las cajas, que se resume en tres puntos: crédito local, obra benéfico social y apoyo a la iniciativa empresarial. No está mal como definición del espíritu mutual de las cajas de ahorros. Ahora bien, con la nueva reforma del Gobierno Rajoy, está por ver cuánto tiempo tardará Caixa en perder el control (51% o similar) de Caixabank. Creo que no mucho más allá de la jubilación de Isidro Fainé, aunque citando a Botín, sobre este particular, el presidente de Caixabank asegura que ambos "estamos en plena forma".

En resumen, Caixabank es un caso único en España. Mantiene una OBS de 500 millones de euros y lleva ya cinco años en ese nivel de cuantía. Es además una obra social, es decir, humana, aunque quizás sobre la OBS actual, que no deja de ser espectacular, es decir, espectáculo.

Mensajes económicos de Fainé y Nin: elector privado ya se ha desapalancado, ha pagado sus deudas y se autofinanza con austeridad y rigor; el sector público no. Pero lo que los manifestantes profesionales piden en la calle es, precisamente, todo aquello que supone más endeudamiento público, hoy llamado nuestros derechos.

Segunda idea no menos importante: el negocio bancario ha dejado de ser negocio. A las prueba nos remitimos (o se remite Fainé): la rentabilidad sobre activos (ROA), a septiembre, era negativo (-0,8%) en la banca española. No es de extrañar que Fainé sorprenda con un "la banca ha dejado de ser banca, es un servicio". Una forma de decir que la banca vive de las comisiones, sobre todo la banca con 25.000 empleados, como es La Caixa, y que juega a dar un buen servicio "presencial".

Y no ha sido un buen año para Caixabank. Dos puntos de la cuenta de resultados bastarán para demostrar esa afirmación: el beneficio se salva gracias a un crédito fiscal, dado que el esfuerzo de saneamiento ha sido feroz, sobre todo por la absorción de Banca Cívica.

Y más: los rendimientos de las empresas participadas cuadriplican el resultado consolidado. Para que luego digan que las participadas industriales eran una rémora para las cajas de ahorros.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com