A través de su ministro de Planificación, el duro Julio de Vido, recuerda que YPF tiene que seguir siendo una compañía de bandera

Eso frenaría el plan primero de Brufau, ahora asumido por La Caixa y Luis del Rivero y negado por el primero, de venderle un 85% a Petrochina. Y la cosa no acaba ahí: la Casa Rosada amenaza con estatizar Endesa Argentina y las autopistas de Abertis

No cita nombres, salvo YPF, pero en Argentina todos saben lo que quiere decir. El ministro de planificación argentina, el poderoso Julio de Vido (aunque podría cambiar de destino próximamente) ha concedido una entrevista a Página 12, la publicación más Kirchnerista de todas.

Y lo ha dejado claro. En primer lugar, la amenaza a todas las concesionarias que no cumplan sus contratos: en definitiva, alusión a las autopistas de Abertis, además de una mención a Endesa, la mitad de la luz en el gran Buenos Aires. Menciones y amenazas, que todo es uno.

Pero la afirmación más concreta hace alusión a Repsol y a su filial argentina YPF. De entrada, un jarro de agua fría a las aspiraciones tanto de Luis Del Rivero como de La Caixa. La Casa Rosada considera que YPF es una compañía de bandera, es decir, de bandera argentina, por lo que no puede venderse el 85% en poder de Repsol a la petrolera Petrochina.

No olvidemos que ésta era la opción primera de Antonio Brufau ante la batalla del dividendo. Ahora, la venta a un tercero y el abandono total, que no parcial, de la Argentina, es la opción de La Caixa y de Luis del Rivero, pero no de Brufau.

Es más, De Vido se echa un farol y asegura que está dispuesto a escuchar una oferta de Repsol para comprarle su participación.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com