Defiende la inversión en ACS, por su componente eléctrico y en Sacyr, por su componente petrolero
Durísimo estuvo el presidente de Mutua Madrileña, José María Ramírez Pomatta, en la mañana del martes 13, al rendir cuentas de los resultados de la compañía durante 2006. En inequívoca referencia a su competidor, Mapfre, Pomatta advirtió que no estaba de acuerdo con la representación de resultados Pro forma (presentados por la aseguradora tras su conversión en sociedad anónima): "En los resultados remitidos a la CNMV yo veo que Mapfre individual ha ganado (en 2006), 128,6 millones de euros, frente a los 187 de 2005, es decir, un 39% menos. Y si miro el balance consolidado veo que ha conseguido 330 millones de euros, un 4% más, no 600 millones… Así empezó Enron. Con estas cosas hay que ser serios… y creo que la CNMV debería hacer algo... porque el mercado se fía de estas cuentas".

En otro orden de cosas, Pomatta defendió la inversión de Mutua en la constructora ACS por su presencia en el sector eléctrico y en Sacyr, competidora de ACS, por su presencia en el sector petrolero y gasístico, a través de Repsol YPF.

Anunció que la futura Ciudad Sanitaria madrileña, que supondrá una inversión de más de 600 millones de euros, y que los terrenos (verdadero secreto de la entidad) se firmarán en breve.

Por otra parte, advirtió que el sector asegurador está llamado a la concentración, porque el actual nivel de descuentos y ofertas no es sostenible, cuando se exigen más reservas y se encarecen los costes, y anunció un proceso de fusiones en el sector.

Mutua obtuvo en 2006 un beneficio bruto de 727 millones de euros, un 15,4% más que en 2005. El Evitad creció un 13,5% y las primas devengadas el 23,2%, hasta los 1.106 millones de euros. A pesar de la gradual diversificación, el seguro del automóvil continúa siendo, a día de hoy, la clave de las cuentas de Mutua.

Por último, aplaudió la creación de un organismo regulador del sector, poniendo como ejemplo al Banco de España y a la CNMV.