Cuenta con el visto bueno del Banco de España y la racionalidad económica

 

La fusión de las cajas gallegas ha formado parte del encuentro entre Zapatero-Rajoy de este miércoles. Tanto que dice Zapatero que no es la primera vez que hablan de este tema, aunque espero que sea la última. El escollo parece puesto en Galloso, presidente de Caixanova y que exige ser presidente de la resultante durante cinco años. Rajoy ha estado muy duro con él y le ha acusado de poner en riesgo la operación. Si la operación se frena porque un señor quiere estar 5 años más, mire Ud. este país tiene un problema muy serio. Zapatero, más fino, no ha querido entrar a valorar su responsabilidad o irresponsabilidad, sino que pone de manifiesto que la lentitud de las operaciones no es responsabilidad del Gobierno. No se le puede pedir al Gobierno que el presidente sea X o Y. ¡Buen dardo! No obstante, ha terminado concluyendo que espera que haya responsabilidad por parte de todos.

Andrés Velázquez

andres@hispanidad.com