Sr. Director:
Este martes Zapatero ha utilizado el nombre de Dios, faltando el respeto y de forma grave a todos los cristianos que reconocemos en esta palabra el origen de la realidad y de su propia conciencia y por supuesto, muchos de ellos votantes que fueron de él, aunque hoy, creo ya ha perdido muchos de esos votos.

 

Probablemente ha pretendido hacerse el gracioso en la refriega política con Rajoy que le ha pedido que presente un plan energético como Dios manda, expresión que en español, desde hace muchos siglos, es sinónimo de algo bien hecho, por lo que una vez más demuestra su ignorancia. El Presidente del Gobierno le ha dicho al líder de la oposición, que hable con Dios y que le diga cuál debe ser ese plan energético. Hasta el que reniega y blasfema contra Dios lo hace con una seriedad y un dramatismo que no tiene Zapatero.

La historia, el hombre y Dios, son tres realidades que no se pueden separar. No ha habido época alguna en la historia, que no sea a la vez de los hombres y de Dios. Es una idea que debiera tener presente Zapatero, por su bien y el de todos.

María Muñoz