Sr. Director:
Vuelven a quedar en evidencia Cebrián y sus sucesores en la dirección de El País,  reducidos ahora a ser los mariachis del consejero delegado, perdón, CEO que ahora PRISA es una empresa global y cotiza en Wall Street.

 

De nuevo traicionan todos los principios que antaño proclamaban, y que hicieron líder a El País. ¿Dónde quedó aquello de que la independencia de un periódico sólo la garantizaba su solvencia económica? ¿Y aquello otro de que solo una redacción bien pagada podía proporcionar un trabajo profesional y honesto?

El País se desangra y sus fieles lectores lo lamentamos pero últimamente ya sólo nos unen razones casi sentimentales y al final acabaremos abandonándolo. Y es que ¿pueden ser los artículos inanes de José María Ridao la principal referencia de El País? o Ramoneda?

Guste o no, hay que reconocer la innovación de un diario bien hecho, mayor honestidad que sus competidores, el talento que en su día aunó, pero la degradación del periódico y su línea editorial es cada vez más evidente en esta España que lega un personaje tan inconsistente y frívolo como ZP.

¿Culpables del descalabro?: pregunten a Cebrián y a la alta dirección que le rodea, en que se gasto  5. 000 millones de euros durante la ultima década: Vertix-TVI, Le monde, GLR, la OPA de Sogecable....

Por mucho que busquen no encontrarán ningún criterio de rentabilidad en tamaño despilfarro, no hallarán en el balance anual de la compañía dividendos percibidos de esas empresas en las que se ha invertido esa fortuna pero sí los intereses  que hay que seguir pagando por todos los prestamos solicitados.

Por no hablar de fracasos como Localia o la prensa regional. Yo como lector llegué a la conclusión de que los gestores del grupo PRISA no leían su propio diario, sólo así me podía explicar que en la época del famoso 'top manta', el MP3 y el Emule decidieran dedicar más de 50 millones de euros a comprar empresas discográficas. Más dinero tirado por los desagües. Al menos no les dio por dedicarse a producir cine mudo o fundar el Pony Express.

Recuerdo que Eulogio comentó hace tiempo que a Cebrián no le preocupaba la herencia de los Polanco, ahora parece que tampoco le preocupa ya la herencia de El País y en unos años veremos conmemoraciones de lo que fue este diario como los que hemos presenciado sobre "La Codorniz" o "Debate". Sombras evocando un pasado polvoriento del que los nuevos no entienden nada.

Juan Briongos