Ayer nos enterábamos de que Clos iba al Bulli, el restaurante carísimo de Ferrán Adriá. Lo que es más discutible es que vaya en helicóptero con sus amigos, primero porque es una horterada y el helicóptero dice que es de un amigo, ¿de qué amigo?, pero cómo que con los amigos en helicóptero a un restaurante. Y ayer estuvo inmenso, Clostilla, nos va dar grandes días de gloria, no tiene el toque de Montilla, pero darle un poco de tiempo al anestesista. Estos se creen que esto es como Barcelona: ¡que no Clostilla!, que aquí no hay censura de prensa, que si aquí se hunde el Carmelo, se cuenta. No han hecho la transición a la democracia. Tienen que acostumbrarse. Tú actúa como si esto fuera una democracia, que te irá mejor.