El comisario de Economía de la Unión Europea, Joaquín Almunia, otro de los socialistas convencidos de que Zapatero es un desastre y que cuanto antes acabemos con el Zapatismo mejor que mejor, se prodiga por doquier en todos los medios españoles, justo ahora en que se supone tiene que repetir como comisario.

Almunia pide ahora reforma laboral sin abaratamiento del despido. ¿Qué es exactamente lo que está pidiendo? ¿Despido libre pero pagado? De otra forma, no se entiende. Y si se trata de eso, que lo diga claro. En efecto, en España se percibe una tendencia lamentable a la precarización del empleo. Y, en efecto, el miedo a contratar de los empresarios sólo se solventará con el despido libre aunque pagado, con unos topes máximos para indemnizaciones, para no hundir a la empresa.

Sería bueno caer en al cuenta de que un empresario no es un sujeto maligno que disfruta despidiendo trabajadores. Contrata cuando lo necesita y despide cuando no puede pagarle. Pero como sabe que despedir es muy complejo se cura en salud con contratos temporales, esos con los que no puede formarse una familia.

No, la dignidad del trabajador es perfectamente compatible con el despido libre. Con lo que no es compatible es con los salarios bajos. Y qué curiosos, los salarios indignos suelen ser los más propios de países proteccionistas en materia de empleo. Ejemplo, Estados Unidos: despido libre, y no caro, pero salarios mucho más altos que los españoles e impuestos más bajos.

Eulogio López

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