La asociación Profesionales por le Ética informa sobre las nuevas objeciones en Barcelona y Ciudad Real y presentación de una nueva Plataforma de Padres en Murcia.

Recientemente, un grupo de padres y madres (correspondientes a 24 alumnos) se han concentrado ante el Departamento de Educación de la Generalitat de Cataluña en Barcelona para comunicar su voluntad de objetar frente a la asignatura Educación para la Ciudadanía. El portavoz de los padres, Galo Navarro, ha manifestado que con este gesto quieren expresar su deseo de que en las escuelas se garantice la libertad ideológica y se respete el derecho de los padres para que sus hijos reciban la educación que sea conforme con sus convicciones morales y religiosas.

Por su parte Ramón Novella,  presidente de Profesionales por la Ética de Cataluña ha recordado que en Cataluña ya hay interpuestos 4 recursos ante el Tribunal Superior de Justicia en contra de la desestimación de las comunicaciones de objeción frente a Educación para la Ciudadanía y próximamente se presentarán 3 nuevos recursos. Novella ha reiterado su apoyo al recurso interpuesto por  la Fundación Abat Oliba, E-Cristians y Juristes Cristians de Catalunya en contra de los Decretos que desarrollan Educación para la Ciudadanía.

En otras comunidades autónomas prosigue la campaña frente a Educación para la Ciudadanía. Así, en Ciudad Real, el Foro Ciudad Real en Libertad, acaba de comunicar 9 objeciones en Campo de Criptana que se suman a las 118 contabilizadas hasta ahora en la provincia, a pesar de que la asignatura se implantará a partir del curso que viene.

En Región de Murcia los padres se han organizado para luchar en defensa de la libertad y el derecho de los padres a la educación de sus hijos, como proclama el Art. 27.3 de la Constitución Española. Por este motivo ha creado la Plataforma 27.3 que tiene como objetivo luchar contra la asignatura Educación para la Ciudadanía impuesta por el Gobierno a todos los alumnos y todos los centros con el objetivo de formar la conciencia moral de los alumnos.

La plataforma pretende la supresión de la asignatura como obligatoria y evaluable y promueve la objeción de conciencia como única alternativa que les queda a los padres para defender el derecho a la educación moral de sus hijos.

Leonor Tamayo

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