Sr. Director:
A raíz de las declaraciones del Sr. Corbacho, ministro de Trabajo, sobre la imperiosa conveniencia de hacerse un plan de pensiones privado me he planteado muy seriamente suscribirme uno.

 

Tengo 42 años y llevo 18 trabajando, mi mujer no trabaja. Ingreso 1.850 mensuales y como gastos fijos tenemos: 600 de alquiler, 125 de la letra del coche, 70 de electricidad, 28 de agua y basura, los gastos de alimentación rondan los 600, 58 de transporte, no puedo incluir los gastos de hija mayor (18 años) universitaria ni los de mi hijo (16 años) estudiante de bachiller, por ser difícilmente calculables.

En resumidas cuentas, es raro el mes que me sobran 50 . Con estas cuentas me dirigí al banco y propuse hacer un plan de pensiones aportando 25 mensuales. El empleado que me atendió, al poco de conocer mis posibilidades, llamó a los servicios de seguridad y sin contemplaciones me pusieron en la puerta de la  calle; pensaban que estaba gastándoles una broma. Nada más lejos de mi intención.

Tras mi estrepitoso fracaso aprovecho la ocasión para ofrecer mis servicios: Hombre joven, atractivo, 190 cm, rubio, ojos verdes, musculado y muy cariñoso se ofrece para dar compañía y cualquier menester.

Todo sea por tener un plan de pensiones, como el Sr. Corbacho, Zapatero, etc.

Manuel Villena Lázaro