Sr. Director:
Con estupefacción me entero de la próxima eliminación de 60.000 aves en Barcelona por el método del "gaseado", es decir, encerrando a los animales en una cámara e inhalándoles gas venenoso hasta matarles.

 

Es un sistema probadamente ineficaz para controlar el número de aves además de extremadamente cruel. 

¿Por qué algunos partidos políticos catalanes, tan preocupados por acabar con las corridas de toros, están ahora callados y mirando a otro lado ante este masivo maltrato de miles de animales en Cataluña? ¿Por qué el nacionalismo catalán no permite matar a los toros y sí a otros animales? 

En fin, es la incoherencia propia de quienes han pretendido disfrazar de defensa de los animales su único objetivo, que es eliminar de Cataluña todo lo español como es la fiesta nacional.

Rosa Álvarez