El secretario de Participación Social del PSOE, el conocido lobbista homosexual, Pedro Zerolo, se declaró "efervescente", tras las declaraciones realizadas el pasado fin de semana por Monseñor Rouco Varela en las que denunciaba una "apostasía silenciosa". En su opinión, la jerarquía está distanciándose de la feligresía y del mensaje de Jesús de Nazaret. "Por más que leo los Evangelios, no encuentro nada de lo que dice la jerarquía", señala.

Preguntado por los informes negativos del Consejo de Estado y del CGPJ, Zerolo contesta que, en ambos casos, "se han retratado". Según Zerolo, el Consejo de Estado se excedió en sus competencias realizando valoraciones políticas cuando su cometido era exclusivamente jurídico. En cuanto al CGPJ, al que acusó de estar gobernado por la "mayoría ultraconservadora", señaló que comparar el "matrimonio gay" al "matrimonio entre un hombre y un perro" es inconstitucional. "Al final, va a terminar teniendo razón la vicepresidenta del Gobierno, en el sentido de que hay poderes tenebrosos en las togas y en las sotanas", concluye Zerolo. O sea, que no se trataba de un "calentón" -con perdón- de la "vice", sino de la línea del Partido que sostiene al Gobierno. Para ir colocando las cosas en su sitio.

Por su parte, la secretaria de Política Internacional del PSOE, Trinidad Jiménez, considera que la jerarquía "no respeta los principios de respeto de la cultura católica" (sic). En su opinión, la Iglesia muestra un espíritu reaccionario similar al protagonizado en el siglo XIX frente al liberalismo. Culta que es una. Jiménez lamenta, además, que la Iglesia esté dando marcha atrás a los avances del Concilio Vaticano II. No se acordaba bien, pero al final le ha venido a la cabeza. "Se va a producir una desafección del pueblo católico frente a una jerarquía que se convierte en portavoz de una minoría", profetiza doña Trinidad. ¿Doble contra sencillo a que no?