• Mediante limitaciones a la objeción de conciencia, a la libertad de expresión, a la libertad de asociación o al derecho de los padres de educar a sus hijos según sus convicciones.
  • Por ejemplo: falta de protección legal para los farmacéuticos que se niegan a vender anticonceptivos o para los empleados públicos que no quieren registrar el matrimonio entre personas del mismo sexo.
  • Lo denuncia el 'Observatorio sobre la intolerancia y la discriminación contra los cristianos en Europa'. 
Vatican Insider recoge el nuevo informe del 'Observatorio sobre la intolerancia y la discriminación contra los cristianos en Europa'.

El último informe se centra en el año 2012 y se pregunta cómo es posible que una mayoría -por ejemplo los cristianos en Europa- sea discriminada. Pero así es.

Explica que además de episodios de intolerancia, violencia o vandalismo cuyo blanco son los cristianos o sus lugares de culto, se producen "restricciones legales" que afectan la libertad de los cristianos de profesar su fe.

Las "restricciones legales" indicadas en el estudio afectan a cinco puntos clave de la libertad religiosa que, según la Convención europea de los derechos del hombre (artículo 9), pertenece no solo a los individuos sino también a las comunidades de creyentes: limitaciones a la objeción de conciencia, a la libertad de expresión (impuestas por las leyes en contra de la violencia y la intolerancia), a la libertad de asociación, políticas de equidad consideradas discriminantes por algunas comunidades de fe y restricciones al derecho de los padres de educar a sus hijos según sus convicciones.

Y detalla las violaciones a la libertad religiosa en países como Francia, España, Bélgica o Gran Bretaña: falta de protección legal para los farmacéuticos que se niegan a vender anticonceptivos y para los empleados públicos que no quieren registrar el matrimonio entre personas del mismo sexo, hasta las denuncias en contra de los que critican, con la Biblia en la mano, el Islam o a los homosexuales.

"A veces -indicó la directora del Observatorio, Gudrun Kugler, en Tirana- me preguntan cómo es posible que una mayoría pueda ser discriminada. Bueno… no es el cristiano de nombre, plenamente integrado en la "mainstream" de la sociedad, el que sufre la discriminación. Son todos aquellos que se esfuerzan para vivir según los exigentes estándares éticos del cristianismo los que se convierten en el objetivo de las oposiciones. Ellos no son la mayoría. Y aunque lo fueran, la historia ha demostrado que una minoría dominante puede discriminar a una mayoría pacífica, como pudimos ver en el caso clamoroso del apartheid".

El Observatorio subraya que hace dos años la Ocse había pedido que Europa abriera "un debate público sobre la intolerancia y la discriminación en contra de los cristianos, garantizando el derecho de los cristianos a participar plenamente en la vida pública".

Según Kluger, Europa está lista para una "razonable reconciliación" entre las personas con una fe fuerte y la mayoría, que parece sentirse a disgusto con la religión. Pero, para que esto se lleve a cabo, es necesario "combatir en contra de la sub-información, recopilando los datos sobre los crímenes de odio en contra de los cristianos. En algunos países, por ejemplo, los actos de vandalismo en contra de un lugar cristiano son considerados como actos de vandalismo en contra de un edificio público".

Andrés Velázquez
andres@hispanidad.com