Para Paco Rosell, en Onda Cero, tenemos un presidente que no es fiable ni siquiera en las matemáticas. Si ese acuerdo es imposible entre PP y PSOE, ese pacto tendría mucho menos apoyo, pasaría de 20 a 13 millones de personas. La sesión de ayer certificó que el pacto antiterrorista está muerto desde que Zapatero comenzó a gobernar. Él decía que fue el padre de eso pero él ha obrado en contra de esa política. Otra vez se confía en el apoyo del PNV, otro gato escaldado de la ruptura de la tregua anterior con ETA. Con esos socios, se trata de aguar el vino del pacto antiterrorista y esa es la gran responsabilidad de Zapatero. Rajoy ha demostrado la paciencia del santo Job porque sus encuentros con el presidente se han saldado con sendos fracasos. Lo único que van a hacer es crispar el parlamento. Con lo cual, hemos hecho mal negocio.