Será una tenaza: Rosell cuenta con el apoyo del presidente de las Cámaras de Comercio, Gómez Navarro, ex ministro socialista. Financiación y descentralización, los dos ejes del programa roselliano.

El ministro más aficionado a las conspiraciones, el titular de Industria, José Montilla, no pierde ripio. Ahora pretende desplazar de la Presidencia de la CEOE a José María Cuevas, que ya ha anunciado que se presenta al próximo mandato (el séptimo), como presidente de la patronal CEOE.

La campaña ya está en marcha, y para ello no hay más que leer la edición los dos diarios más montillanos de España. El País y La Vanguardia de Barcelona. En ella, el presidente de Fomento del Trabajo, Joan Rosell, explica que quiere modernizar la patronal española, mejorar subsistemas de financiación y descentralizar.

Gómez Navarro es amigo de Rosell, y participó en la misma candidatura para hacerse con el contrato de la Plaza de Toros de Madrid. Rosell, además, representa a la CEOE en el Consejo Superior de Cámaras. Por último, Gómez Navarro fue el encargado de lanzar la primera andanada del Gobierno Zapatero contra la patronal CEOE. Navarro insiste en que la CEOE tiene escasa representatividad. Lo cual es cierto : las cámaras tienen mucho más, sólo que se trata de una representatividad forzosa y de un pago asimismo exigido por ley.

Dice Rosell que pretende modernizar la CEOE, y alude a los principios de financiación y descentralización. La verdad es que la CEOE tiene un presupuesto anual de 11,7 millones de euros y 120 empleados. Más del 90% de ese presupuesto lo aportan los propios empresarios y el resto son subvenciones. Precisamente, Fomento se financia vía subvenciones en mayor porcentaje que la central.

Luego está lo de la descentralización, algo ante lo que un Solbes o un Caldera tiemblan. En efecto, si el diálogo social ya es complejo entre una patronal y dos centrales sindicales, asusta pensar lo que puede ocurrir si se autonomiza la negociación salarial.

Eso sí, Cuevas preside la CEOE desde 1984, y si consigue hacerse con la victoria en las propias elecciones a día de hoy cuenta con mayoría asegurada entre los delegados- estaríamos ante un séptimo mandato. En eso se apoya Montilla, para quien Cuevas lidera una gerontocracia.